PAU VERGARA: Hace 38 años la compañía valenciana, L´Om inició su andadura en el teatro valenciano con un Dario Fo. Por el camino vinieron rotundos éxitos teatrales que llegó al gran público como la genial Imprebis, que debe ser uno de los espectáculos que más veces se ha reestrenado en Valencia. Ahora llega al Teatro Talía Descarados, de Darío Fo. Hemos hablado con Santiago Sánchez, su director.
Santiago, llevas una trayectoria de éxitos con múltiples montajes en los últimos años, ¿qué te ha hecho decantarte por Dario Fo?
Precisamente el primer montaje de L’Om fue un Dario Fo: “Mort accidental d’un anarquista”. Eran los años ochenta y lo presentamos en teatros como el Princesa, Micalet o Escalante, además de proporcionarnos nuestras primeras giras. En el año 86, cuando vino a Valencia a presentar “Misterio Bufo”, tuvimos contacto directo con Fo. Así que su sátira, su teatro popular y su compromiso político están en el ADN de la compañía que luego hemos desarrollado con la improvisación de “Imprebís”, el aprendizaje de maestros como Boadella o con montajes como el “Galileo” de Brecht.
¿Qué se van a encontrar los espectadores?
Ante todo, una gran comedia escrita por un maestro de la escena. Dario Fo bebe en la mejor tradición de la Commedia dell’Arte, de los juglares y los bufones populares. Con todo ese material crea una estética propia que le hizo merecedor del Premio Nobel de Literatura en 1997. Muchos se sorprendieron porque suponía un reconocimiento al valor de la cultura popular y la transmisión oral. Fo escribió la obra original para denunciar la corrupción y manejos de los poderes fácticos italianos. Algo que nos suena cercano, ¿verdad?
Entiendo que habéis hecho una traslación del panorama italiano a España.
Claro. Con Dario Fo no tiene sentido hacer un teatro de reproducción y museo. La fuerza está en traer la situación al “aquí y ahora”. En los años 90, ya hicimos una versión de esta obra en colaboración con Carla Matteini, mano derecha en España de Fo. En ese momento la diana fue un personaje de la banca que parecía intocable, pero acabó en prisión… A Carla y Dario les gusto tanto que me propusieron firmar conjuntamente la adaptación. Fiel al espíritu con el que trabajamos entonces, ahora el protagonista es una alta… altísima personalidad de nuestro estado. Estoy seguro de que a los dos les encantaría, soltarían una carcajada enorme y dirían que es una versión de mucho “e-mérito”
¿Ha costado mucho hacer esa traslación?
No. Desgraciadamente hoy, en nuestro país, las corruptelas son incluso más reconocibles: espionaje, comisarios corruptos, cloacas del estado, jueces que te lo “afinan”… en fin, he oído hablar incluso de un ex jefe del estado huido que ha quedado impune aunque se le hayan demostrado, al menos, cuatro delitos y un sinfín de conductas reprobables… La realidad siempre supera a la “ficción” pero, al menos, el teatro sirve para poner en la picota de la sátira a toda esa panda de “Descarados” como magníficamente han retratado Gallego y Rey en el cartel de la obra.
La comedia, la sátira es más necesaria que nunca después de una pandemia, ¿no?
La comedia siempre es terapéutica. Ahora que se habla tanto de problemas mentales, yo creo que es mejor ir al teatro que atiborrarse de pastillas. Si además la sátira tiene el talento y la inteligencia de Fo, entonces es indispensable. Y no tanto por la pandemia sino por el auge de ideas reaccionarias que comenzamos a detectar. Como planteaba Umberto Eco en “El nombre de la rosa” la risa es un buen antídoto contra cualquier totalitarismo. O en palabras del propio Dario Fo: “todavía no entienden que el verdadero crecimiento cultural se logra solo en la diversión, la pasión y la risa”.
Has repetido el elenco de Por los pelos, quedaste contento con los actores…
Han sido 5 años de gira por toda España en los que se ha consolidado un elenco estupendo y de gran calidad. A Juan Gea lo admiro desde hace más de 30 años cuando lo descubrí en las funciones del Clásico y el Español, con Marsillach y Miguel Narros respectivamente. Lola Moltó, me parece la mejor actriz valenciana de su generación, tanto en comedia como en drama. Marta Chiner, se incorporó a “Por los pelos” en la segunda temporada, y su energía y talento fueron todo un descubrimiento. Rafa Alarcón me parece un artista polifacético capaz de poner en marcha proyectos como el Circuit de Café Teatre y, además, ser uno de sus monologuistas de mayor éxito. Y qué decir de los “Carles”, Castillo y Montoliu, y Víctor Lucas, con los que comparto desde hace años la gran aventura de “Imprebís”. No solo es estar contento, es quererlos y admirarlos.
Y también volvéis a hacer tándem con Olympia Metropolitana, impulsando el teatro desde lo privado…, es todo un milagro.
Hace diez años, cuando Enrique Fayos tomó la responsabilidad de dirigir el Teatre Talía, me llamó. Hablamos de lo importante que era hacer un proyecto que diera estabilidad a nuestros actores, actrices y compañías con la máxima calidad. Conjuntamente hemos demostrado que se pueden hacer temporadas no de días o de semanas… sino de meses en Valencia, con un formato asequible para su programación posterior en el Circuit y también en los principales teatros privados y públicos de toda España. Aportamos algo tan importante como es el “oficio” y creo estamos haciendo una unión estratégica muy interesante para instituciones y público que, igual que en la gastronomía, deben apreciar y potenciar la calidad de la cultura de proximidad. Somos producto Km. 0.