Hablar de Paco Roca es hablar de Valencia, de valencianos y de memoria. Repasando su trayectoria nos damos cuenta del enorme peso de los recuerdos autobiográficos y familiares para componer su obra. La emoción es el ingrediente que alimenta La casa, un personal homenaje a su padre, pero también la memoria de los héroes valencianos que liberaron París que plasmó en Los surcos del azar.No es de extrañar que el cine haya llamado a su puerta porque sus cómics son como una cámara que nos sumerge en otras épocas, en personajes lejanos que parecemos conocer porque todo el mundo tiene padres y abuelos. Su obra transmite un olor clásico, perenne, que permanece en el tiempo.Pero ese acercamiento personal es lo que hace su trazo algo joven y moderno.
En Regreso al Edén, su nueva obra (digo obra porque el cómic es una creación artística) nos presenta el retrato de una familia en la Valencia de 1946. “A partir de una foto familiar de 1946 en la antigua playa de Nazaret de la capital valenciana, Paco Roca dibuja un fresco sobre la España de la posguerra a través de una de aquellas familias humildes –reflejo de la inmensa mayoría de la sociedad que sobrevivía bajo la dictadura franquista–, con serios problemas para acceder al sustento, obligada a acudir por sistema al mercado negro para hacerse a duras penas con una alimentación básica diaria. Un vigoroso y delicado retrato en cuatricromía de una España de tonos grises y libertades cercenadas por un régimen político caldo de cultivo, igualmente, de la propagación de miserias morales. Trufada de referentes autobiográficos, Paco Roca da un paso más con Regreso al Edén en su búsqueda de la memoria. Emocional y equilibrada, plena de recursos gráficos y soluciones narrativas de primer nivel, Paco Roca plantea su obra más ambiciosa como creador completo desde ‘Los surcos del azar’ y ‘La casa’”.
Como decía, su potencia visual y narrativa ha hecho que varias de sus obras se hayan llevado al cine como Memoria de un hombre en pijama o Arrugas. Pero el proyecto más ambicioso es la serie de seis capítulos que prepara Alejandro Amenábar para adaptar el El Tesoro del cisne negro.Mientras esperamos a ver el resultado resulta recomendable navegar por las páginas de Regreso al Edén. Nos daremos cuenta que a pesar de la dureza de estos tiempos de pandemia y confinamiento nada se asemeja a aquellos años de postguerra, escasez y rabia de los que perdieron la guerra.