PAU VERGARA: La Inteligencia Artificial ha aterrizado en el Festival de Cine de Cannes. Microsoft ha montado una impresionante paraeta en la Croissette donde se dan charlas diarias con cineastas  guionistas y expertos que cuentan sus experiencias de creación con las herramientas disponibles.

La imagen de un Terminator 800 surgiendo de un amasijo de hierros y matando a los restos de la insurgencia humana sigue residiendo en una parte del imaginario de los creadores. Skynet, una herramienta de IA de uso militar había tomado conciencia de sí misma y tras ser creada decide que la raza humana es una amenaza y la destruye. Sin descartar que en el futuro ocurra algo parecido, no parece que estemos aún en esa fase.

Parece que la IA aplicada a los procesos creativos será  incorporada como una herramienta más al workflow que ya manejan directores, guionistas, productores, story board, diseñadores de producción, directores de arte y otros técnicos del ámbito del cine y la televisión.

En los últimos años, la inteligencia artificial (IA) ha emergido como una herramienta transformadora en múltiples industrias, y el sector audiovisual no es la excepción. La IA está redefiniendo la manera en que se crean, producen y distribuyen contenidos audiovisuales, ofreciendo nuevas posibilidades creativas y eficiencias sin precedentes.

Una de las áreas donde la IA está teniendo un impacto significativo es en la creación de contenidos. Herramientas impulsadas por inteligencia artificial como GPT-4, DALL-E y otras tecnologías avanzadas están permitiendo a creadores generar guiones, diálogos y hasta storyboard con una rapidez y precisión antes inimaginables. Estas herramientas pueden analizar grandes cantidades de datos y aprender patrones de narrativa y estilo, proporcionando sugerencias creativas que pueden inspirar a los guionistas y directores.

Además, la IA está siendo utilizada para la generación de efectos visuales y animaciones. Programas como Adobe After Effects y otros software de edición ahora incluyen funciones basadas en IA que permiten crear efectos especiales complejos de manera automática, ahorrando horas de trabajo manual y permitiendo a los artistas enfocarse en los aspectos más creativos de su trabajo.

Varios ponentes que pasaron por Microsof Café destacaban que dentro de nada saldrá un nuevo género de películas generadas por IA y otro mixto donde convivirán actores reales con otros generados por IA. Donde sin duda habrá una revolución es en las posibilidades de previsualización de secuencias y trailers. Cosas que antes eran imposibles hacer ahora estarán en la palma de la mano.

Eficiencia en la Producción

La inteligencia artificial también está revolucionando la fase de producción. Sistemas avanzados de reconocimiento facial y de voz, por ejemplo, permiten una edición más rápida y precisa. Herramientas como Frame.io y otras plataformas colaborativas basadas en IA están mejorando la gestión de proyectos, facilitando la comunicación y la colaboración entre equipos dispersos geográficamente.

En Cannes he tenido la oportunidad de asistir a una demostración del software de producción de Largo.io que ya usan estudios y productoras españolas. Básicamente permite automatizar funciones que antes era puramente analógicas. El software permite analizar un guion, buscar el target al que iría dirigido y permite desplegar toda una serie de proyecciones de públicos potencial por edades y sexos y otras herramientas para delimitar el target de tu público. En función del género permite hacer proyecciones de recaudación nacional e internacional, así como sugerir el precio que plataformas y distribuidoras deberían pagar por tu película. Como digo permite automatizar procesos que antes se hacían más o menos manuales. Con los informes generados por IA puedes reescribir o modificar los proyectos para buscar acercarlos a tus objetivos.

La IA en la Distribución y Personalización de Contenidos

La distribución de contenidos audiovisuales también ha sido transformada por la inteligencia artificial. Plataformas como Netflix, Amazon Prime y YouTube utilizan algoritmos de IA para personalizar las recomendaciones de contenido, analizando los hábitos y preferencias de los usuarios para sugerirles programas y películas que probablemente disfrutarán. Esta personalización no solo mejora la experiencia del usuario, sino que también aumenta el tiempo de visualización y la fidelización a la plataforma.

Además, la IA está siendo empleada para optimizar la publicidad y el marketing de contenidos audiovisuales. Algoritmos avanzados pueden analizar el comportamiento del público y predecir qué tipos de anuncios serán más efectivos, permitiendo campañas de marketing más precisas y eficientes.

Los desafíos

A pesar de los innumerables beneficios, la integración de la IA en los procesos creativos audiovisuales plantea también importantes desafíos y consideraciones éticas. La automatización de tareas creativas puede llevar a una reducción en la demanda de ciertos roles laborales, lo que genera preocupaciones sobre el futuro del empleo en la industria. Además, el uso de algoritmos de recomendación y personalización puede dar lugar a problemas relacionados con la privacidad y la manipulación de la información.

Es esencial que la industria audiovisual adopte un enfoque equilibrado, donde la innovación tecnológica se combine con una reflexión ética y una regulación adecuada para garantizar que los avances en IA beneficien a todos los involucrados.

De hecho Microsoft se ha esforzado mucho en presentarse ante los creadores de Cannes como un partner creativo, una herramienta para ayudar. Su lema es “la AI no es creativa, lo eres tú”. Y en cierto modo es cierto. El creador sigue siendo humano y no parece que eso vaya a cambiar a corto plazo.

La inteligencia artificial está indudablemente revolucionando los procesos creativos audiovisuales, ofreciendo nuevas herramientas y oportunidades que están cambiando la manera en que se crean y consumen contenidos. Aunque existen desafíos significativos, la adopción responsable y ética de estas tecnologías puede llevar a una era dorada de creatividad e innovación en el mundo audiovisual. Pero ha llegado para quedarse.