A la precisión humana con que narra la evolución de estos dos personajes condenados a encontrarse hay que añadir la ajustada descripción que nos proporciona del Sur recién derrotado en la Guerra de Secesión, «ocupado» por las casacas azules y pleno de cotidianas servidumbres para sus, moral y económicamente, deprimidos habitantes. Una mirada realista y bastante novedosa sobre este paisaje que incluye valiosos detalles, entre ellos una diversidad lingüística que el cine ha obviado la mayoría de las veces.