Este 2020 está siendo tan raro, que todo parece estar del revés. Con la incertidumbre y el miedo como síntomas de cabecera para cualquier gestor cultural, este año, el Festival Internacional de Valencia se celebra durante el puente de diciembre. En este 2020 no iremos al Rialto en tirantes, ni iremos al cinema a la fresca del Centre del Carme por las noches, y los miembros del jurado no se escaparán a la Malvarrosa a darse un baño tras las proyecciones matinales. Es raro, pero esto es lo de menos, pues si algo destaca de esta 35ª edición de Cinema Jove no es su clima por debajo de los 30 grados ni que iremos con abrigo, sino su corta duración apenas de 5 días.
Y es que la maldita pandemia ha hecho estragos en la cultura, en especial en los eventos masivos como festivales de cine, de música y demás fiestas alternativas. Ya contaba en Turia hace pocas semanas la saturación de eventos culturales de este otoño-invierno en la ciudad, y es que aun con ese miedo e incertidumbre en el cuerpo, muchos de ellos se han celebrado casi con total normalidad, adaptándose a los nuevos tiempos Covid, con precaución pero con la misma ilusión si cabe de años anteriores. En el caso de Cinema Jove, al público medio se le escapa el motivo por el cual se celebra en la mitad de jornadas y, lógicamente, con la mitad de programación y de actos. No habrá premio Luna de Valencia, ni tributo a grandes cineastas con el ciclo “El joven…”, ni gala de clausura y ni tan siquiera Sección Oficial de largometrajes a concurso. Por no haber, no hay ni un director estable al mando de esta versión “de bajo presupuesto” del certamen, ya que, un año más, el futuro de esta figura tan importante en un festival de semejante envergadura está en el aire. Logra salvar los muebles Carlos Madrid, el (ahora) jefe de programación de esta edición invernal que está apunto de empezar.
Sea como sea, lo que es seguro es que será una edición histórica y especial, y ya conocemos aquello de “lo bueno, si es breve, dos veces bueno”. Cinema Jove, sí o sí pero virus mediante, abrirá sus puertas (presencialmente) este sábado en el Teatro Principal, en una inauguración en la que se presentarán los premios Un futuro de cine, que este año recaen en dos jóvenes actores valencianos con amplia trayectoria en el teatro. Hablamos de Glòria March, en la cresta de la ola gracias a su papel protagonista en La Mort de Guillem (y que será programada durante el festival), y de Raúl Navarro, a quien podemos ver recientemente en Un cercle en l’aigua, de Vicent Monsonís. Además, la Sección Oficial de cortometrajes, la sección estrella de esta “winter edition”, cuenta con varias sesiones programadas que podremos disfrutar en la Sala Rialto, con lo mejor del cortometraje internacional del último año, reconocidos muchos de ellos en festivales como el de Berlín, Clermont-Ferrand o Cannes, entre otros. La otra sección que goza de gran popularidad es la de webseries, que un año más cuenta con una interesante propuesta de hasta 14 producciones que van desde Australia hasta Dinamarca, haciendo parada en nuestra tierra, con la proyección de Diari de la quarantena, del humorista Eugeni Alemany, y Cancelled, de la actriz valenciana María Albiñana y Amor en tiempos del Corona, de actor y escritor Sergio Villanueva.
En relación a los largometrajes, habrá dos estrenos mundiales, tres de ellos documentales y una ficción que coronan esta especie de Sección Oficial que no tendrá premio. Por un lado, Batega! es una producción de TV ON Producciones que cuenta la historia de la Jove Orquestra de la Generalitat Valenciana desde dentro y a través de cuatro de sus músicos. Otro de los documentales que veremos es Esclats de Llum, de Nacho Ruipérez. En este caso, y autodenominado como un mockumentary, el realizador valenciano nos traslada a comienzos de este año y muestra cómo la irrupción de la pandemia a roto muchos sueños de artistas emergentes, en este caso, el de una aspirante a artista fallera. Sirva como homenaje póstumo el documental titulado Pérez Arroyo, alma de animador, del Carles Palau y Raúl González Monaj, donde ambos directores repasan la trayectoria del creador de uno de los primeros estudios de animación en Valencia. El cuarto largometraje, en este caso ciencia ficción, se titula Jesus Shows You The Way To The Highway, está dirigido por Miguel Llansó y es una sátira gamberra contra el capitalismo y la irrupción de la inteligencia artificial, que no dejará a nadie indiferente.
Esta edición se completa con un ciclo dedicado a Mario Benedetti, con dos películas basadas en sus textos que se proyectarán en la Filmoteca -ver Rincón de la Filmo-, el concierto de bandas sonoras de Fellini de la mano de la Spanish Brass (Premio Nacional de Música 2020), y una clase magistral en el Centro Barreira del director de arte de La casa de papel, el joven valenciano Abdón Alcañiz. Lo dicho, si breve…