REDACCIÓN: La gran ganadora de los Oscar 2025 ha sido Anora, una película que costó apenas seis millones de dólares y que se impuso sobre producciones de cientos de millones, como Wicked (145 millones) y Emilia Pérez (20 millones). Su victoria no es solo un reconocimiento artístico, sino una declaración de principios: el cine independiente a contracorriente puede vencer en Hollywood.
El cineasta Sean Baker, conocido por retratar los márgenes de EE.UU. sin moralismos ni artificios, logró un hito histórico al convertirse en el primer director en llevarse cuatro estatuillas en una misma noche: Mejor Película (como productor), Mejor Dirección, Mejor Guion Original y Mejor Montaje. La película obtuvo un quinto premio con la sorprendente victoria de Mikey Madison como Mejor Actriz, dejando a Demi Moore sin la estatuilla por La Sustancia.
El peso de Cannes y la nueva Academia
La victoria de Anora también subraya la influencia de Cannes y la progresiva internacionalización de la Academia. Es la tercera película que gana el Oscar tras haber obtenido la Palma de Oro, siguiendo los pasos de Marty (1956) y Parásitos (2020). En apenas cinco años, dos filmes con este recorrido han triunfado en Hollywood, marcando una nueva tendencia.
La ceremonia comenzó a inclinarse en favor de Anora cuando Baker se llevó el premio a Mejor Guion Original, que dedicó a la “comunidad de trabajadoras sexuales”, protagonistas habituales de su cine. La confirmación llegó con el galardón a Mejor Montaje, seguido por el de Mejor Dirección, que le entregó Quentin Tarantino, un padrino del cine indie. En su discurso, Baker defendió la exhibición en salas: “Las salas de cine están en peligro y es nuestra misión protegerlas. Si no, perderemos nuestra cultura”.
La caída de Emilia Pérez
Uno de los focos de la gala estaba en Emilia Pérez, que llegaba con 13 nominaciones pero se vio envuelta en la polémica por los tuits racistas de su protagonista. Finalmente, el filme solo logró dos premios: Mejor Canción (El Mal) y Mejor Actriz de Reparto (Zoe Saldaña). La gran sorpresa fue su derrota en Mejor Película Internacional frente a Aún estoy aquí de Brasil, lo que se interpretó como un castigo de la Academia por la controversia.
El presentador de la gala no dejó pasar la oportunidad de abordar el escándalo con su característico sarcasmo: “Si decides tuitear sobre mí después de la gala, recuerda: mi nombre es Jimmy Kimmel”.
Adrien Brody se impone a Timothée Chalamet
La categoría de Mejor Actor también mantuvo la tensión hasta el final. Aunque Timothée Chalamet había ganado el premio del Sindicato de Actores por su transformación en Bob Dylan (A Complete Unknown), finalmente Adrien Brody se llevó el Oscar por The Brutalist, interpretando a un arquitecto húngaro que escapa del fascismo y se enfrenta a la brutalidad del capitalismo en EE.UU. En su emotivo discurso, abogó por la paz y la inclusión: “No dejemos que el odio venza. Sigamos luchando por lo que es justo”.
The Brutalist también se llevó los premios a Mejor Fotografía y Mejor Banda Sonora, convirtiéndose en la segunda película más premiada de la noche.
Kieran Culkin y el triunfo de la animación independiente
La gala comenzó con el Oscar a Mejor Actor de Reparto para Kieran Culkin por A Real Pain. En su discurso, Culkin aprovechó para recordar que le prometió a su esposa un segundo hijo si ganaba el premio.
Otra gran sorpresa fue la victoria de Flow como Mejor Película de Animación, imponiéndose a las gigantes Pixar y DreamWorks. Un nuevo golpe del cine independiente a las grandes productoras.
Una gala sin riesgo político (con una excepción)
A pesar del contexto político y las primeras medidas reaccionarias del nuevo presidente de EE.UU., la gala se mantuvo mayormente alejada de posturas políticas. Salvo algunas referencias sueltas, como el apoyo a Ucrania y un comentario sobre Anora (“Al menos alguien se levanta contra un ruso poderoso”), el evento evitó profundizar en la realidad global.
Sin embargo, los directores de No Other Land, documental sobre la ocupación israelí en Cisjordania, rompieron el silencio con un discurso conmovedor. Basel Adra, palestino, y Yuval Abraham, israelí, pidieron acción urgente para detener la destrucción en Gaza: “Esperamos un futuro donde nuestras hijas no vivan bajo vigilancia, desplazamientos y represión. Exigimos una solución política con derechos para ambos pueblos”.
La gala de los Oscar 2025 quedó así marcada por el dominio de Anora, la reafirmación del cine independiente y un Hollywood que, pese a ciertos avances, sigue optando por la neutralidad en tiempos convulsos.
LISTADO COMPLETO
Mejor película
- Anora
Mejor dirección
- Sean Baker, por Anora
Mejor actriz protagonista
- Mikey Madison, por Anora
Mejor actor protagonista
- Adrien Brody, por The Brutalist
Mejor actriz secundaria
- Zoe Saldaña, por Emilia Pérez
Mejor actor secundario
- Kieran Culkin, por A real pain
Mejor guion
- Anora
Mejor película de animación
- Flow
Mejor película documental
- No Other Land
Mejor película internacional
- I’m Still Here (Brasil)
Mejor montaje
- Anora
Mejor diseño de vestuario
- Wicked
Mejor corto de animación
- In the shadow of the cypress
Mejor maquillaje y peluquería
- La sustancia
Mejor diseño de producción
- Wicked
Mejor canción original
- El mal
Mejor corto documental
- The Only Girl in the Orchestra
Mejor sonido
- Dune: Parte Dos
Mejor efectos visuales
- Dune: parte dos
Mejor música
- The Brutalist
Mejor guion adaptado
- Cónclave
Mejor corto de ficción
- I’m not a robot
Mejor dirección de fotografía
- The Brutalist